Ciudad de México.- ¿Sabias que hay diferentes estilos de demostrar amor y que estos se determinan desde que eres un niño?
Youtube Tipos de amor
Cuando se trata de relaciones afectivas, cada uno tiene su propia forma de demostrar amor, pero a veces, estos comportamientos pueden ser mas negativos que positivos.
Según estudios científicos, los niños que tuvieron una relación amorosa y segura con sus padres mientras crecían, tienden a tener mejores relaciones interpersonales en el futuro. Mientras que los niños que tuvieron relaciones inestables, tienden a tener comportamientos poco saludables e inestabilidad en sus relaciones.
5 tipos de amor
1 El evasivo
las personas con estilo de amor evasivo suelen parecer distantes o poco comprometidas. No se permiten sentir emociones, para así protegerse y a menudo se sienten incómodos cuando otras personas a su al rededor se emocionan. Valoran su espacio personal alejados de otras personas.
Si tienes el estilo de amor evasivo, es posible que de niño hayas crecido en un entorno que no demostraba mucho afecto, un entorno que ponía mas énfasis en ser independiente y autosuficiente y cuando algo te afectaba negativamente, es probable que no recibieras el consuelo que necesitabas, ya fuera emocional o físico. por esto, en algún momento dejaste de prestar atención a tus sentimientos y necesidades para lidiar con el estrés y la ansiedad de tener poco o ningún consuelo de parte de tus padres.
Amor evasivo Apego evitativo
2 El indeciso
la persona indecisa o vacilante es aquella que duda ante diferentes acciones u opiniones, le cuesta decidirse y se siente insegura. Si tienes este estilo de amor, puedes tender a idealizar las nuevas relaciones y cuando la otra persona muestra algún rasgo o comportamiento que no te imaginabas, empiezas a dudar seriamente de la relación, e incluso piensas en que la mejor opción seria terminar con ella. De niño probablemente creciste con padres que eran imprevisibles o no siempre estaban cuando los necesitabas, siempre tenían sus planes, salían a menudo y pasaban poco tiempo pendientes de ti. Por una razón u otra, tus necesidades no eran prioridad de tus padres. Por ellos, es posible que hayas desarrollado un miedo al abandono debido a que no recibías un afecto estable y adecuado por parte de tus padres. Arrastras desde niño una alta sensibilidad que hace que creas encontrar en tu vida la mas mínima sensación de que alguien se esta distanciando.
EL MIEDO AL ABANDONO – Auténtico Amor | El blog de Isabella Paz
3 El controlador
si tienes el tipo de amor controlador, probablemente sientes la necesidad de tener el control dentro de tu relación para evitar los sentimientos negativos o la vulnerabilidad que experimentaste de niño. Al tener el control, te aseguras de limitar tu exposición a sentimientos como la humillación el miedo o la impotencia. La única emoción que no te hace sentir vulnerable es la ira, así que te permites mostrarla para expresar tus emociones. Es probable que tengas una forma peculiar de hacer las cosas y cuando no te salen bien, puedes enfadarte o estresarte. Si te identificas como controlador, probablemente creciste en un hogar donde no recibías la suficiente atención o seguridad, cuando había algún tipo de daño en tu vida, nadie estaba ahí para asegurarse de que estuvieras a salvo. Por ello no te gusta salir de tu zona de confort y hacías todo lo posible para no experimentar sentimientos negativos. Aprendiste a ser emocionalmente duro y a cuidar de ti mismo porque, si no lo hacías, acababas profundamente herido.
4 El complaciente
Alguien con el tipo de amor complaciente tiene como objetivo principal asegurarse de que los demás a su alrededor sean felices, incluso si esto significa sacrificar sus propios deseos y necesidades con el fin de poder hacerlo. las personas con el tipo de amor complaciente, suelen vigilar que todos en su entorno estén felices. Si alguien tiene un cambio negativo en su estado de animo, el complaciente lo sufre también internamente, sintiéndose ansioso, molesto, o estresado. Si eres un complaciente, te cuesta mucho trabajo manejar el conflicto emocional, por lo que tiendes a mentir, hacer o decir lo que la otra persona quiere solo para evitar esa situación difícil. Normalmente a los complacientes les cuesta mucho trabajo decir que "no". De niño probablemente creciste con padres demasiado protectores, propensos al enfado o muy críticos contigo. Es posible que tuvieran estándares demasiado altos que querían que cumplieras y si no lo hacías tan bien como ellos querían, no obtenías una respuesta positiva de su parte. la gente probablemente te veía como el niño bueno, pero en lugar de recibir consuelo de tus padres, es probable que eras tu el que se disculpaba cuando ellos reaccionaban mal ante algo que estresaba completamente fuera e tu control. Como tus padres reaccionaban de esa manera, es probable que tu hicieras todo lo imaginable para evita recibir una respuesta negativa de ellos, incluso si esto significaba mentir sobre algo.
5 La victima
Las victimas suelen carecer de autoestima y son propensas a sufrir depresión o ansiedad. En lugar de vivir y tomar decisiones tienden a dejarse llevar por las circunstancias. En las relaciones, no es raro que se relacionen con un controlador, ya que así repiten lo que experimentaron en su infancia. las victimas están acostumbradas a obedecer, por eso les resulta mas fácil o incluso reconfortante estar con un controlador en su vida, ya que es a lo que están acostumbrados. Si tienes el estilo de amor de victima, es probable que creciste en un hogar caótico, tuviste padres que se enfadaban o incluso llegaban a ser violentos. Aprender a ser complaciente y obediente te ayudo a no llamar demasiado la atención. ¿Recuerdas haber utilizado tu imaginación para escapar de la realidad en la que te encontrabas? Esto es muy común en las victimas, ya que estar demasiado presente resulta muy doloroso para ellas.
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